EL ALMA NO ES EL CUERPO
Nos enseñaron desde niños cómo se forma un cuerpo
sus órganos sus huesos sus funciones sus sitios
pero nunca supimos de qué estaba hecha el alma
¿será de sentimientos, de ensueños, de esperanzas?
¿de emociones, de tirrias, de estupores?
lo cierto es que, ignorada, el alma arde en su fuego
tiene espasmos oscuros punzadas de ternura suburbios de delirio
¿será tal vez una inquilina del corazón?
¿o viceversa? entre ellos no hay frontera
¿o será la asesora principal de la mente?
¿o viceversa? entre ellas no hay disputa
¿o será capataza de la pobre conciencia?
¿o viceversa? entre ellas no hay acuerdo
el alma tiene hambres y cuando está famélica
puede herir puede armarse de enconos o de furias
no hay que pensar que el alma es un tul de inocencia
ajeno a los agravios que sufren cuerpo y alma
en el alma se forman abscesos de rencores
tumores de impaciencia hernias de desamparo
el problema es que no hay cirujanos de alma
ni siquiera herbolarios
el alma es un secreto, una noción
una nube que suele anunciar llanto
pero después de tantas búsquedas
de pesquisas inútiles y de adivinaciones
nos queda apenas una certidumbre
que el alma no es el cuerpo
pero muere con él
Mario Benedetti